Como es que pasa el tiempo, como nos va cambiando la vida... pareciera que fue ayer cuando tan solo era una chiquilla sin preocupaciones ni obligaciones, una niña que solo le reía a la vida.
El paso de los años, me ha traído muchas sorpresas algunas agradables y varias no tanto, momentos que han dejado huellas, vidas que me han enseñado que tengo que vivir y ser feliz. Es un poco irónico lograr ser feliz, si cuando te sientes seguro algo sucede que corrompe la alegría.
Existe el miedo de amar de mostrar los sentimientos, el no querer entregarse a alguien que en cualquier momento se pueda perder, la constante agonía de no querer volver a sufrir mas perdidas. Se ha perdido la fe y la esperanza y se ha perdido el rumbo, el temor a ilusionarse por miedo a caer en el abismo de realidad que podría agotar la vida.
Los sentimientos se mezclan es el sufrimiento quien gobierna el corazón, la inseguridad y el miedo son aliados en mi contra, y te vas hundiendo poco a poco y por más que luches por encontrar esa luz que te guíe, te encuentras solo en la oscuridad de los recuerdos, en las sombras del ayer de los cuales intentas salir pero no encuentras un apoyo que te ayude a escapar y vencer el miedo a fracasar.
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